viernes, octubre 14, 2011

era maleïda com ella mateixa, una autèntica possessa


Era maleïda com ella mateixa, esbirra del poder establesío, hija de los mamarrachos melandrucos mesetarios, esta endevidua no daba para más. Verla en su intimidad era como parir sin haber jodido. Ni intentándolo tan siquiera podia hacer un papel tan relevante en su pugna pro-pepera. El verla me produsia congojo, impoténsia e impedànsia total. Mis sircuitos se revelaron con una reacción inusitada. Sólo de verla por la pequeña pantalla tuve que fermentar el disco duro de mi ordenador, retirar el pinganillo del usb, y conectar con un buen jack mi trasero al pc, como un superheroi de la marvel; el conector que me salia del culo iba directo a la toma de usb. Me lansé un enorme pedo glorioso para darle fuersa a la tal Soraya, a ver si podia tragárselo bien tragado la muy tortillera. Entonses hice una limpiesa de sable virtual o sibernética; para serles sincero, pienso que hubiera sido más ascarosso por mi parte convidar a una botifarrada a la mare de Déu de Montserrat. Ante todo quiero que sepan que jo sóc 'tot un sañó', en definitiu, jo estic fet un cavalieri del honori. Es evidente que es la mar de indesente echar mierda y más si no estamos en guerra sivil. Es pues pootánto harto imprescindible el ser cuidadoso en según que menesteres y en según qué relasiones de tarannà ficticio. Si yo decido responder, mal, pero si yo decido no responder, yéndome cagando leches ante mi querida interlocutora aún peor; a mi no me se da nada bien hacer el bujarrón cobarde. Con mis dotes de vigoroso ansiano, es una forma de actuar que no necesito. És a dir, pienso yo que tomando ciertas actitudes como referensia personal, 'máomeno' estilo Camps, seria un flaco favor a mi persona y a mi entorno. Seria como resolver un sencillo problema de adicción numérica haciendo integrales... cuando tan sólo fuera necesaria hacer una simple suma pitagórica. En esas estamos. Esa gente de la política de altos vuelos se complica la vida ella sola con la propia gente de su partido; jo diría que burrus es poco pa desirles.